3.1.07

Habemus domus

Por fin tengo casa, después de media vida de alquiler me he hecho con este lugar que habito; no, no lo he comprado, simplemente es que he decidido que es aquí donde habré de morirme. No creo en las pertenencias, al menos las inmuebles. Me basta utilizar las cosas para que sejan minhas, no necesito comprarlas, ¿para qué? si ya he pagado por ellas viviéndolas.
No creo tampoco en que los legados, sean en verdad algo bueno para los hijos. Quitarles preocupaciones, es también desposeerlos de la tensión necesaria para afrontar cualquier otra batalla en nuestra guerra interminable; es una especie de gimnasia vital, luchar por lo nuestro. No hagamos unos inútiles de nuestros diablillos, que sepan también : qué es el frío y como se combate; el hambre, y cómo este no es una desgracia que siempre acontece a otros, más allá del cristal polvoriento de la tele.
Bueno, voy a cortar aquí porque veo que me está saliendo un post de tintes bélicos y regustillo ∀narcohippieglobalizador.
Ya sabéis, el casado, casa quiere, y si bien pasamos del rollo legal, decidimos vivir juntos, el ánima que me habita y yo. Buenas noches.

6 comentarios:

Quiero ser como tú dijo...

Enhorabuena por tu casa! En cuanto a lo de los diablillas, tienes toda la razón, que aprendan a sobrevivir.

Saludos

Anónimo dijo...

Muy buen principio de vida, digno de usted. Mi teoría es algo parecida: Mi hogar está allí donde me siento bien, sea comprado o alquilado, que a la larga es lo mismo. ¿Es parecida la teoría o no?

Besosos

Anónimo dijo...

Encontrar el sitio ideal donde vivir, encontrar el sitio en la vida...

Lúzbel Guerrero dijo...

Así es Bettina, de eso se trata.
¿Ha leído Ud. alguna vez a Fernando Pessoa?, si es que no, se lo recomiendo encarecidamente. Intente conseguir: "El libro del deasosiego", es el libro de mi vida, en él he aprendido a completar las frases inconclusas y balbucientes de mis cuestionamientos. Fernando Pessoa fue muchos hombres: Bernardo Soares, Ricardo Reis, Alberto Caeiro, Álvaro de Campos, Antonio Mora, y algunos otros que ahora se me escapan, creo que alguno de ellos le resultará una grato descubrimiento. Gracias por la visita,es siempe un placer recibirle.

Anónimo dijo...

¿tanto tiempo de noviazgo y todavía no os habíais decidido a vivir juntos?? mal de muchos, no sé de qué me extraño... quizás es que eso de convivir con uno mismo es como las "parejas", con sus buenas y malas rachas... sólo que este caso todavía no lo contempla la ley del divorcio...
(por fin puse fotos actuales de aquello que tú llamas "patria")
bona nit, company

Anónimo dijo...

Te felicito por tu nuevo (o viejo pero como si fuera nuevo) habitáculo. Gran decisión, darle cobijo al alma de uno a su mismísimo lado.